Telmisartan es un inhibidor de la angiotensina II. Bloquea la acción de la angiotensina II mediante su función antagonista sobre los receptores de esta sustancia que está presente de forma natural en el cuerpo, lo que causa la contracción de las arterias y aumenta la presión arterial. Telmisartan es, por lo tanto, un medicamento antihipertensivo utilizado en el tratamiento de la hipertensión y la insuficiencia renal crónica. Telmisartan tiene varias ventajas: su vida media es de 24 horas (más larga que otros antagonistas de los receptores de angiotensina II) y no altera el metabolismo de la bradicinina (a diferencia de los inhibidores de la ECA), lo que evita efectos secundarios asociados como la tos.

Los estudios han demostrado que durante la infección por SARS-Cov-6, la proteína ACE2 de las células alveolares es atacada. La pérdida de la acción enzimática de ACE2 provoca un aumento en la concentración de angiotensina II. Este sería el punto de partida para la tormenta de citoquinas descrita en los pacientes de Covid-19 más afectados. Por esta razón, se han iniciado estudios clínicos para probar el efecto del telmisartan sobre el desarrollo del síndrome de dificultad respiratoria aguda (SDRA) en pacientes con Covid-19.