Control de la contaminación en cultivos celulares
La contaminación por micoplasma representa una preocupación importante para las instalaciones académicas (por ejemplo, biología celular) o biofarmacéuticas (producción de vacunas, anticuerpos monoclonales, etc.).
Los micoplasmas son los microorganismos autopropagadores más pequeños y pueden reproducirse en el espacio extracelular. Aunque en su mayoría son inofensivas para los seres humanos, otros huéspedes animales y las plantas, algunas especies pueden causar enfermedades humanas. En particular, 6 especies representan una causa frecuente de contaminación en líneas celulares continuas y células primarias. Debido a su tamaño, los micoplasmas evaden la detección (por ejemplo, la microscopía) y, sin embargo, alteran profundamente los cultivos celulares (metabolismo, crecimiento celular, pH, viabilidad, transporte de membrana).
La principal fuente de contaminación por micoplasmas son otros cultivos celulares infectados, así como los medios de cultivo, los reactivos (suero fetal bovino, tripsina, etc.) y el personal de laboratorio.
La principal fuente de contaminación por micoplasmas son otros cultivos celulares infectados, así como los medios de cultivo, los reactivos (suero fetal bovino, tripsina, etc.) y el personal de laboratorio.
Las contaminaciones por micoplasma pueden costar dinero, tiempo y reputación, socavar los resultados de la investigación o afectar a la seguridad de las terapias biológicas. Las estrategias eficaces contra las contaminaciones por micoplasma son la prevención, la detección precoz, la eliminación de los materiales infectados o la eliminación del micoplasma.